Construyendo puentes para la igualdad de género
La temática del eje Igualdad de Género se plantea como motor transformador de las nuevas decisiones. Hoy tenemos el desafío de continuar trabajando en ser sociedades más inclusivas e innovadoras, buscando el balance, la complementariedad y el enriquecimiento que nos plantea la diversidad para un mundo más igualitario y sostenible.
Algunos puntos a considerar:
– Nuevas y viejas desigualdades: brecha digital y brecha de género.
– Políticas de igualdad de género.
En los últimos años, la agenda de género ha ganado mucha presencia en la región y ya ocupa un papel central en las estrategias y planes de las empresas y de la economía. En ella, la igualdad de oportunidades, la educación en materias STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas), la innovación, el intraemprendimiento y el aumento del número de mujeres en roles digitales son algunos de los ámbitos en los que se están concentrando los mayores esfuerzos.
Hoy, promover la participación de las mujeres en profesiones STEM es crucial para cerrar las brechas de género en el mercado laboral y promover un crecimiento más incluyente. La Unión Europea estima que cerrar la brecha de género en STEM podría resultar en un incremento acumulado del PIB per cápita de la UE hasta en un 3 %.
Según el Gender Gap Report de 2022, América Latina y el Caribe ocupa el tercer lugar de todas las regiones, después de Norteamérica y Europa. A nivel de indicadores, 16 países han mejorado la paridad de género en los ingresos estimados y se detecta una mejora general de la percepción de igualdad salarial por un trabajo similar en 15 países. En general, ha aumentado la proporción de mujeres en puestos directivos y en puestos técnicos en la mayoría de los países; en este sentido, destacan los casos de Guatemala y Uruguay, donde la paridad ha aumentado entre los trabajadores en al menos 10 puntos porcentuales. Además, la brecha de género entre los trabajadores con funciones técnicas se ha reducido en la mayoría de los países de la región y países como Bolivia y Chile avanzan más de diez puntos porcentuales.
En definitiva, ha habido grandes avances en los últimos años en materia de igualdad de género; sin embargo, esta seguirá siendo una de las áreas prioritarias que ocupará un lugar destacado en los debates sobre el futuro de la región. Incentivar la participación de las mujeres en proyectos de liderazgo de índole económica y social será un factor clave en las estrategias de desarrollo de cara a la próxima década.