Energía renovable para un mundo mejor
La temática del eje Sostenibilidad, Acción Climática, Compromiso Social y Nuevos Modelos de Financiación para el desarrollo de negocios sostenibles tiene por objetivo recomendar acciones para una Iberoamérica que brinde una mejor calidad de vida en todos los aspectos, generando un marco innovador para el desarrollo de los países y sus negocios, y respondiendo a los desafíos que nos plantea el mundo actual y cambiante en el que estamos.
Para ello tomamos en consideración:
– La agenda 2030 como marco para un nuevo modelo de desarrollo sostenible.
– La agenda verde como impulso a una Iberoamérica post pandémica innovadora y resiliente.
– La innovación empresarial como factor clave para lograr una economía baja en emisiones.
– El auge de la economía circular como forma de crear riqueza justa y sostenible.
– El sector privado y la aplicación de factores ESG en sus modelos de negocio para el impulso de empresas de triple impacto.
– El sector financiero y bancario ante el nuevo paradigma de desarrollo sostenible.
– Los bonos temáticos como nuevos instrumentos de desarrollo para financiar la innovación.
– El rol de los organismos multilaterales de financiación en un nuevo escenario de inversión.
En los últimos años, la lucha contra el cambio climático y por la protección del medio ambiente se ha convertido en una de las principales preocupaciones de las empresas iberoamericanas. Tras años de divulgación desde medios de comunicación e instituciones públicas, la acción climática marca ya algunas de las políticas públicas y privadas de mayor calado a nivel regional y mundial.
América Central y América del Sur se hallan altamente expuestas y vulnerables a los impactos del cambio climático, señala el último informe del IPCC, «Cambio climático 2022: impactos, adaptación y vulnerabilidad». En esa línea, varios gobiernos de la región han tomado medidas para mejorar estos resultados. Destaca el caso de Chile, país que en 2022 se convirtió en el primer país de América Latina y el Caribe en emitir un bono soberano vinculado a la sostenibilidad, o Sustainability-Linked Bond (SLB), por un valor de 2.000 millones de USD, medida que ha sido muy aplaudida por la comunidad internacional. La emisión se enmarcó en los objetivos climáticos establecidos por el país en sus Contribuciones Nacionales Determinadas (NDC).
Inmersa en la redefinición del entorno económico que se está configurando como consecuencia de la aparición de las nuevas transiciones, Iberoamérica está tratando de situar la sostenibilidad en el centro de sus programas de recuperación económica. Tras varios años de campañas de sensibilización, son muchos los ciudadanos que sitúan el cambio climático entre los principales problemas a los que se tendrán que enfrentar en los próximos tres años. Así, el tejido empresarial de la región ya está impulsando iniciativas comprometidas con los objetivos de la Agenda 2030 y con la Agenda Verde. Las grandes empresas iberoamericanas ya priorizan las alternativas respetuosas con el medio ambiente en su toma de decisiones, En este camino, el sector empresarial debe emplear la Agenda 2030, sus 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y 169 metas, como una herramienta en la toma estratégica de decisiones y una referencia transversal en los nuevos modelos de negocio corporativo que surjan como consecuencia de la transición ecológica
En definitiva, la sostenibilidad y acción climática son factores clave para la recuperación y deben aplicarse de forma inclusiva, en consonancia con los nuevos modelos de financiación pública para el desarrollo de negocios sostenibles y teniendo como pilar las perspectivas económicas de Iberoamérica.